viernes, 2 de marzo de 2012

DESCARGAS, ¿LEGALES O ILEGALES?

El tema de las descargas es muy delicado. Hay canciones, películas o libros que ya no están en el mercado, pero que son interesantes y la única manera de escuchar las canciones, ver las películas o leer libros, es a través de las descargas. La persona que económicamente no puede permitirse el lujo, si bien digo, el lujo de comprar un disco, una entrada para ir al cine o un buen libro, tiene que echar mano a Internet. Los artistas, productoras y editoriales  tendrían que darse cuenta  de eso. Con eso no se quiere decir que una persona que se baje productos de Internet (películas, música, libros,…)  no lo haga con la intención de aprovecharse o beneficiarse, sino que está interesado en ciertas cosas que económicamente no tiene acceso.
Realmente creo, que a un artista no le importa mucho que las personas se bajen cosas de Internet, pues en cierto modo, es publicidad para ese artista. El problema lo tiene las productoras que no ganan el dinero tan fácilmente. Si en vez de preocuparse de las bajadas en Internet pusieron precios más asequibles, los productos que ya no tienen la venta, siguieran en el mercado, el tema de las descargas sería distinto.
Las descargas sin abusos, quiero decir: descargas una película, un disco o un libro, sin después hacer copias para lucrarte. Es una nueva forma de divulgación cultural, una oportunidad en la cual se la brinda a la persona que económicamente no puede acceder a ese tipo de cultura.
Mi opinión es que mientras las descargas sean para tener acceso a la cultura, pero como he dicho antes, sin lucrarse, porque lucrase significa robar el trabajo del autor, y el trabajo es sagrado, el autor o autores no pondrían ningún impedimento a las descargas no masivas.